Los gatos son más exigentes con sus dueños
Si tienes un gato en casa quizá pienses que la mayor parte del tiempo te ignora, y, si no lo hace, es porque quiere comida. Los perros por otro lado parecen tener un entusiasmo increíble por sus dueños y los buscan para jugar (o lloran cuando ya se han ido). El ‘refrán’ es claro: los perros piensan en sus dueños como dioses y los gatos como esclavos, podríamos decir.
Según Psycology Today, un estudio reciente sugiere que, los gatos son más exigentes con sus dueños que los perros (al menos en lo que respecta a los matices de su voz). La respuesta es que los gatos tienen una reacción mucho más fuerte al habla dirigida a ellos que al habla normal (dirigida a humanos), pero solo si es su dueño quien habla. Si es alguien más, entonces no tienen esta reacción especial. Los perros, en cambio, son menos exigentes. Reaccionan a cualquier discurso dirigido a un perro, independientemente de quién esté hablando. El habla dirigida al gato solo es especial si proviene del dueño, debido a que son más perspicaces.
-Con información de EL CONFIDENCIAL